Según la industria porno describen a un cornudo de la siguiente manera, como un imbécil impotente que no disfruta de ver a su mujer follar con otro.
Esto mis queridos cornudos es lo más alejado de la realidad, ya que para ser un cornudo tiene que haber un consentimiento doble, tu mujer y tuyo, si no pasaría de ser cornudo a ser infidelidad.
Y normalmente una persona infiel nunca le dice al otro que lo esta siendo, al igual que las películas de Disney distorsionan el amor, las pornos distorsionan algunos fetiches.